Creación del mundo y el hombre según la mitología guanche

Primero de todo, ¿qué era la mitología guanche? Era aquella mitología procedente de las Islas Canarias antes de la llegada de los conquistadores cristianos, quienes a su llegada alteraron estas creencias a voluntad, por lo que hoy en día no podemos definir con certeza estas prácticas religiosas pre-cristianas.

Creación del mundo
Según las creencias guanches, había un demonio llamado Guayota, el rey del mal, que vivía en el Teide, al que los guanches llamaban Echeide ("Infierno"). Según la leyenda, Guayota secuestró al dios Magec, dios de la luz y del sol (toda mitología, y cuanto más primitiva con mayor razón, tienen algún "dios sol" al que poder dar las gracias cuando con sus rayos mejora la cosecha, como se explica en la siguiente entrada), encerrándolo dentro del Teide. Esto provocó que los guanches, desesperados, clamaran ayuda al dios principal del panteón guanche, Achamán, del cual se dice que su cuerpo es el cielo. Achamán consiguió derrotar a Guayota, sacar de allí a Magec y taponar el Echeide. Este "tapón" que puso Achamán es lo que se conoce como el Pan de Azúcar, el cono blanquecino que corona el Teide. Tras ello, separó la isla de Echeide hasta que formó de allí las siete Islas Canarias: Tyterogaka (Lanzarote), Erbane (Fuerteventura),  Tamarán (Gran Canaria), Achined (Tenerife), Gomera (La Gomera), Benahoare (La Palma) y Ezeró (El Hierro).
Desde entonces se dice que cuando el Teide entra en erupción es porque Guayota intenta escapar de su prisión, y los guanches, cuando esto sucede, acostumbran a encender hogueras, bien para espantar a Guayota, bien para que, si conseguía salir de Echeide, creyera con toda la multitud de hogueras que seguía en el infierno y pasase de largo.


Teide o Echeide según las costumbres guanches, hogar del demonio Guayota



Reconstrucción de un altar aborigen en la cima de Garajonay (la Gomera) con el Teide de fondo

Creación del ser humano:
En un inicio tan sólo existían la nada y el vacío, y fue entonces cuando Achamán creó el agua y el fuego, la tierra y el aire, y toda la vida. Se dice que eran tan bonito el resultado de su creación que Achamán se regocijaba contemplando todo desde las alturas, hasta que un día, desde la cima de Echeide, decidió que una obra tan bella debía con alguien, por lo que creó a los seres humanos, para hacerles partícipes de este regocijo y para que lo conservasen.